¡Hola que tal!
¿Sabe Usted cuál es la diferencia entre las alianzas electorales y las mafias electoreras? Se lo voy a explicar.
Las alianzas electorales son ENTRE PARTIDOS y están reguladas por la ley, o sea, son legales.
Las mafias electoreras son ENTRE DI RI GEN TES DE GRUPOS POLÍTICOS; estos siembran a sus incondicionales en diferentes partidos. Así, gane el partido que gane: ELLOS GANAN, dicho de otra manera ELLOS NUNCA PIERDEN.
En el PRI Aguascalientes hay, varios grupos políticos. Entre esos grupos hay uno que siembra a sus leales en Morena (debo reconocer que éste grupo obliga a renunciar al PRI, a quienes coloca en el otro extremo de López Mateos).
El otro grupo tiene infiltrados en Morena y en el PAN: en, un grupo político del PAN para ser exactos. Este grupo, sin el menor escrúpulo, permite a sus tentáculos continuar como militantes del PRI, O SEA traicionan a su partido.
Los otros grupos permanecen leales al PRI aunque, en un par de negociaciones han dejado serias dudas sobre sus lealtades institucionales.
Pues bien, he decido no ser cómplice con mi silencio, de este fraude a los ciudadanos de Aguascalientes. Me parece más honesto un político de los llamados “chapulines" que cambian de partido, PERO, Usted ciudadano SABE MUY BIEN que ese o esa política ya no militan en el anterior.
Me habría gustado que el PRI, una vez derrotado, hiciera un análisis serio de sus propios errores y se hubiera puesto a trabajar para enmendarlos, si así hubiera sido, yo me habría hundido en el barco del PRI. Pero así no! NO con ESTA VÍA FRAUDULENTA que buscaron un par de sus dirigentes, para PER MA NE CER a como dé lugar en el poder.
Quedarme en el PRI sólo por inercia, o por hambre, o por cuidar negocios propios o de familia, son cosas que no tengo. ¡Afortunadamente!
No me voy de la vida pública, ni de la vida política local PERO en adelante me declaro LIBRE para apoyar los proyectos personales de los líderes que me convenzan, que me enamoren, que me apasionen.
Me deslindo de los dirigentes fraudulentos del PRI, pero no de los buenos líderes priistas. Digo adiós a la militancia formal, pero no a mi convicción priista. Queda aún mucha gente buena, honesta y comprometida en el PRI.
He decidido pasar el resto de mi vida pública, del lado de la ciudadanía. No tengo como opción afiliarme a ningún otro partido y, agradezco al PRI cada amistad cultivada y cada momento vivido.
Hoy, luego de 35 años, parafraseo a Amado Nervo: PRI nada te debo. PRI estamos en paz.
A ustedes que hoy me ven, les reitero que todo queda como siempre, A SU CRITERIO.
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